A los 77 años, falleció Marcos Mundstock, miembro original de Les Luthiers.
Desde su habitual rol de presentador aparentemente serio e intelectual, nos deleitó con un manejo sublime del lenguaje y la palabra. En nuestros oídos queda ese timbre barítono de su voz, en diversos monólogos legendarios de Les Luthiers, y frases fantásticas con las cuales lo recordaremos por siempre:
- “Todo tiempo pasado fue anterior“.
- “El ego es ese pequeño argentino que todos llevamos dentro”.
- “Si no puedes convencerlos, confúndelos“.
- “Evite accidentes. Hágalo a propósito“.
- “Lo importante es el dinero, la salud va y viene”.
- “Errar es humano, pero echarle la culpa a otro es más humano todavía”.
- “No soy un completo inútil. Por lo menos sirvo de mal ejemplo“.
- “Tener la conciencia limpia es síntoma de mala memoria“.
- “El que es capaz de sonreír cuando todo le está saliendo mal es porque ya tiene pensado a quién echarle la culpa“.
- “Toda cuestión tiene dos puntos de vista: el equivocado y el nuestro“.
- “La pereza es la madre de todos los vicios, y como madre hay que respetarla“.
- “Mastropiero carecía de talento musical, por no hablar de sus deleznables cualidades morales. Pero lo amamos porque nos ha permitido trabajar en lo que más nos gusta y ganarnos holgadamente la vida”.
- “Mis contribuciones musicales son mínimas. Yo soy un lastre en este sentido. Hasta la trompetita que tengo que tocar me cuesta muchísimo”.
- “Yo, a los 68 años, juego cada martes al fútbol. Y mantengo las mismas cualidades técnicas y físicas. O sea, ninguna“.
- “¿Que cómo sería el texto de mi epitafio? Marcos no está, todavía lo estamos esperando”.