De esta manera, el país evita entrar nuevamente en default. Martín Guzmán, ministro de Economía anunció esta mañana que llegó a un acuerdo con los principales grupos de acreedores de la deuda pública. También señaló que se extendió hasta el 24 de este mes el plazo de adhesión de los acreedores para realizar el canje.
Fueron 30 horas de negociaciones ininterrumpidas, en donde se llegó a una reestructuración de una deuda de 68.000 millones de dólares. Así, Argentina pagará 54,8 por cada cien de deuda. El acuerdo, fue con representantes del Grupo Ad Hoc de Bonistas Argentinos, el Comité de Acreedores de Argentina y el Grupo de Bonistas del Canje, entre otros.
Esto “les permitirá a los miembros de los tres grupos de acreedores apoyar la propuesta de reestructuración de deuda de Argentina y otorgarle a la República un alivio de deuda significativo”, expresaba un comunicado.
La fecha límite del proceso de negociación estaba estipulada para el 4 de este mes, y hasta ese momento, las partes no lograban ponerse de acuerdo. Alberto Fernández, le había indicado a Martín Guzmán, que no se moviera de los 53,4 dólares por cada cien de deuda. Es todo lo que Argentina podía pagar, pero los bonistas no aceptaban menos de 56. Por lo cual, no se llegó a un acuerdo.
Sin embargo, tanto la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, como el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, le advirtieron a Fernández los riesgos de mantener al país en suspensión de pagos: intereses prohibitivos, más devaluaciones frente al dólar y pérdida de prestigio internacional.
Esto hizo que el presidente revea su decisión, autorizando a Guzmán, a llegar a los 54,8 dólares. Así, el ministro de Economía se comunicó con Jennifer O’Neill, delegada del poderoso fondo de inversiones BlackRock, quienes finalmente, aceptaron la oferta.
Esto se vio reflejado en los valores argentinos, que el día de ayer subieron un 12% en la apertura de los mercados, un día antes de que Guzmán comunicara de manera oficial la llegada de un acuerdo.
Ahora, el Gobierno también anunció que deberá encarar nuevos acuerdos con el FMI para renegociar una deuda de 44.000 millones de dólares que el país le adeuda al organismo, como consecuencia del préstamo que fue otorgado durante la gestión del ex-presidente, Mauricio Macri.