Es para intentar prevenir el avance de la tercer ola de coronavirus, y por lo pronto, regirá hasta después de Semana Santa. Otros países de Europa analizan tomar decisiones similares.
“Estamos desafortunadamente ante una nueva ola de la enfermedad”, afirmó el Primer Ministro, Mario Draghi. Es que los casos registrados de la útlima semana ascienden a 150.175, lo que significa un aumento del 15% en comparación a la semana anterior.
“En esas dos semanas creció en casi 5000 el número de hospitalizados por ser positivos al virus y el número de pacientes en terapia intensiva es superior a los 650”, detalló.
Es por esto que el Gobierno decidió volver a implementar medidas de aislamiento, las cuales regirán hasta el 6 de abril, en regiones con más de 250 contagios semanales por 100.000 habitantes.
“Medidas más rigurosas y el aumento progresivo de personas vacunadas nos llevan a pensar que tendremos mejores cifras ya en la segunda mitad de la primavera (boreal)”, rescató Roberto Speranza, ministro de Salud.
El 54% de los nuevos casos en Italia corresponden a la cepa británica del coronavirus, lo cual explica el aumento drástico en los contagios. Ayer, se registraron 26.000 nuevos casos y 317 nuevos fallecimientos en las últimas 24 horas.
Lombardía, Milán, Lacio, y Roma, fueron clasificadas como “zonas rojas”, lo cual implica que deberán someterse a una cuarentena total. Esto significa mantener cerradas escuelas y universidades, bares, cafeterías y restaurantes.
En países como Francia y Alemania, también están analizando imitar a los italianos. Por ejemplo, en París, las unidades de cuidados intensivos están una vez más al borde del colapso. Hace varios días, Francia viene registrando cifras de 20.000 y 30.000 contagios diarios.
En Alemania se vive un escenario similar, con los aumentos progresivos en los contagios, vinculados a la cepa del Reino Unido. Es por esto que desde la Asociación de Médicos de Cuidados Intensivos también exigen que se endurezcan las medidas de aislamiento.