La muerte de Sofía Sarkany, vuelve a poner en agenda la importancia de los controles por el cáncer de cuello de útero

La enfermedad que llevó a la muerte a la diseñadora de 31 años, volvió a traer a conversación la importancia de la detección temprana del Virus del Papiloma Humano, principal causante del cáncer de cuello de útero. ¿De qué se trata y cómo prevenirlo?

La muerte de Sofía Sarkany se vive con intenso dolor en el mundo de la moda argentina. Pero más allá de ese terrible suceso, se trata de un buen momento para traer a la agenda la importancia de la prevención y detección de uno de los cánceres más graves que afectan a las mujeres.

Es que más de 2.000 mujeres mueren al año a causa de esta enfermedad en Argentina, que es causado por el Virus del Papiloma Humano. Pero, ¿de qué se trata esta enfermedad? ¿Cómo se puede prevenir o detectar a tiempo?

De acuerdo a Fundación Huésped, el Virus del Papiloma Humano o VPH es un tipo de virus que puede afectar la piel, la boca, o la zona genital o anal. Existen unos 200 tipos de virus y 40 que afectan la zona genital. Estos a su vez se pueden dividir en dos grupos:

  • Los VPH denominados «de bajo riesgo«, que generalmente se asocian a las lesiones benignas, como las verrugas y que no evolucionan a lesiones precancerosas o cáncer.
  • Los VPH denominados «de alto riesgo» pueden llegar a provocar la alteración de las células generando lesiones precancerosas, que con el tiempo pueden evolucionar y convertirse en un cáncer.

El tipo de cáncer más común causado por el VPH es el cáncer de cuello de útero, considerado de alto riesgo.

¿Cómo se transmite?

Se transmite de una persona a otra por el contacto de la piel durante las relaciones sexuales. No se contrae por compartir inodoros, cubiertos o estar en una piscina. Es un virus de fácil transmisión y también muy común. 4 de cada 5 personas pueden contraer uno o varios tipos de VPH a lo largo de su vida, tanto varones, como mujeres.

¿Cuáles son los síntomas?

Lamentablemente, los síntomas no suelen ser detectados a simple vista. Incluso el sistema inmunológico puede curarlo de forma espontánea dependiendo del caso. Los VPH de bajo riesgo puede producir verrugas en la zona genital o anal. En los casos graves, estas pueden presentar forma de “coliflor”. Son tratables, pero pueden reaparecer si el sistema inmunológico de la persona no eliminó completamente el VPH. Aunque cabe aclarar que el VPH que provoca estas verrugas, no es el que causa cáncer.

Los de alto riesgo, no suelen presentar síntomas.

Tener VPH no significa que se vaya a generar una lesión. Sólo el 5% de los casos de VPH pueden volverse persistentes. Si persiste por más de 5 o 10 años, los VPH de alto riesgo oncogénico pueden causar lesiones que podrían ser cancerígenos.

¿Cómo se detecta?

Existen dos tipos de pruebas a los que nos podemos someter para detectar el VPH. Uno es el Papanicolau y la prueba del VPH.

El Papanicolau es un examen pélvico que permite detectar alteraciones en las células del cuello del útero antes de que se desarrolle el cáncer. Consiste en introducir un espéculo en la vagina para separar las paredes y, posteriormente, recoger una muestra de las células del cuello del útero con una espátula o cepillo. Esta muestra se envía al laboratorio para ser analizada y detectar alteraciones celulares anormales. Se recomienda que a partir de los 25 años todas las mujeres se realicen el examen.

Por su parte, la prueba del virus del Papiloma Humano detecta los tipos de virus del papiloma humano de alto riesgo que pueden provocar cáncer cervical. El proceso es similar al del Papanicolau.

Además, el uso del preservativo durante toda la relación sexual, continúa siendo esencial para la prevención de este virus.

Zeen is a next generation WordPress theme. It’s powerful, beautifully designed and comes with everything you need to engage your visitors and increase conversions.