La pareja de actores se encontraba en el momento justo en que la cara frontal del complejo de 12 pisos se desplomó completamente, dejando un saldo de cuatro muertos, además de heridos, y personas desaparecidas.
Gimena Accardi y Nico Vázquez vivieron dramáticos momentos al ser testigos y protagonistas del derrumbe del edificio Champlain Towers en Miami, en el momento en el que se disponían a regresar a su lugar de hospedaje luego de compartir una cena con amigos.
Eran las 02:00 am en el momento en el que el edificio de 12 pisos colapsó a causa de defectos estructurales, dejando hasta el momento un saldo de cuatro muertos y 159 personas desaparecidas.
Tanto Accardi como Vázquez se encuentran entre los argentinos que sobrevivieron al derrumbe, aunque entre el saldo de personas desaparecidas se encuentran otros 9 argentinos que por estas horas continuan siendo intensamente buscados: Se trata de el cirujano plástico reconocido en el ambiente del espectáculo argentino, Andrés Galfrascoli (45), su pareja Fabián Núñez (55) -distinguido productor teatral, dramaturgo y compositor-, y la hija de ambos Sofía Galfrascoli Núñez de seis años de edad. Junto a ellos buscan a otro adulto, identificado como Manuel Lafont.
La pareja de actores se comunicó via stories de Instagram para llevar tranquilidad a sus seguidores, relatando lo que vivieron en esa dramática madrugada. Ambos compartieron en sus redes un mensaje en donde se leía: “Andamos con lo puesto dando gracias al universo por este milagro, rezamos por las víctimas y sus familiares.”
Nicolás Vázquez además, envió algunos audios a la prensa en donde contó su versión de los hechos y cómo sobrevivieron a la tragedia: “Vivimos un momento muy fuerte con Gime. Veníamos de cenar, estacioné el auto como siempre en la cochera, escuchamos un ruido muy muy fuerte, pero no llegamos a entender qué pasaba. Y en diferencia de 6, 7 segundos que subimos al ascensor, se movió el ascensor, parando en el lobby como siempre”.
Luego añade: “Arrancó una polvoreada, un estruendo muy fuerte, no entendíamos qué pasaba. Empezamos a correr, junto con tres o cuatro personas más, no éramos muchos, que estaban desbordados por los nervios, obviamente. Y ahí recién entendimos que se había caído parte de lo que era el estacionamiento: muchos autos hundidos, alarmas sonando. Gime me hace caer la cuenta de lo cerca que habíamos estado de no contarla. Y pasan entre dos o tres minutos más de no entender bien, en un estado de shock que estábamos viviendo, y ahí le digo a la gente, porque estaba muy nerviosa, y a Gimena, principalmente, que cruzáramos. Ahí se escucha un estruendo imposible de relatar: no lo habíamos escuchado nunca en nuestras vidas, era como en las películas, como si fuera una especie de terremoto, de ataque, de… no sé. Lo que ven en las imágenes”.
Vázquez reconoce que “en ese momento” no “éramos conscientes de lo que estaba pasando“, y se quiebra mientras cuenta: “Teníamos una nube de polvo tan grande, junto con el ruido, que no nos podíamos ver. Estábamos uno al lado del otro y no nos podíamos ver”.
Acerca del accidente que sufrió su pareja, Vázquez relató: “Ahí es donde corremos desesperadamente y Gime se golpea contra un árbol, una palmera, así, muy fuerte, y le sale como un huevo muy grande en la cabeza. Me asustó porque fue instantáneo, con mucha sangre, no sangre para afuera, sino como si fuera un… no sé, yo no soy médico, pero como si fuera un huevo, un coágulo, no sé cómo llamarlo. Se hizo un silencio, nos encontramos llenos de escombros. Los vecinos comenzaron a auxiliarnos”.
“Quería mandarles este mensaje para contarlo en primera persona. No quiero ponernos a nosotros en el rol de lo más importante. Acá hay gente que está desaparecida, hay gente muerta y creo que lamentablemente esto continúa para muchos seres queridos que van a tener que sufrir esa pérdida”, concluye Vázquez. Tras lo ocurrido asistieron a ser atendidos en el Aventura Hospital.