Hace tiempo que el rapero ofrece una misa los domingos en su nuevo rol de pastor religioso. En esta oportunidad, su transmisión incluyó la presencia de Marilyn Manson y Justin Bieber. Sí, nosotros tampoco entendemos nada.
Hace tres años, Kanye West comenzó poco a poco a acercarse a su costado más religioso, llegando a presentarse a sí mismo como un líder espiritual. Desde entonces, todos los domingos West ofrece una misa a la que acuden muchas celebridades, en donde priman la música y una estética cuidada.
Este fin de semana, Kanye West volvió a transmitir estas ceremonias, y la de este domingo particularmente hizo incomodar y arquear las cejas a más de uno, por los invitados que lo acompañaron en todo momento: Marilyn Manson y Justin Bieber.
Manson mostró un perfil más bien oculto, y sorprendió verlo vestido de blanco junto a todos los demás. En un momento dado Justin Bieber sostuvo el micrófono para pronunciar: “Hoy expulsamos toda presencia demoníaca en nombre de Jesús”, a lo que Manson asintió con la cabeza.
Es de público conocimiento el rechazo al cristianismo que Manson ha profesado a lo largo de su carrera. Sin embargo, también es de público conocimiento que este año se vio envuelto en más de una docena de acusaciones por violaciones y abusos de todo tipo contra mujeres.
Tras pronunciar algunas oraciones, Manson, Bieber y West se unieron en un círculo de oración, conformando así el trío más bizarro que van a ver hoy.
Se desconoce si todo esto es sólo una estrategia de marketing de Manson para limpiar su imagen de alguna forma, o si su acercamiento a Kanye (como ya se lo ha visto en la presentación de “Donda” en agosto de este año) representa su verdadera reconversión al cristianismo tras décadas de despotricar contra las religiones.