Una auténtica joya audiovisual que solo podía pasar en su momento.
Hagamos un pitch imaginario. Una Tokyo donde el rollerskating está prohibido a tal punto donde la policía aplica fuerza total contra los las bandas de vándalos y un DJ pirata que habla sobre un vinilo capaz de convocar un demonio.
Es ridículo, pero esta es la trama de Jet Set Radio, un clásico de culto el cual perdura en disfrute incluso con la edad, con un estilo y carisma el cual solo el año 2000 podía crear.
Controlando a distintos miembros de la banda “GG”, en Jet Set Radio patinamos por diferentes calles de la ciudad, haciendo trucos y explorando las calles por latas de pintura. Al conseguirlas, toca pintar diferentes partes del mapa con grafiti, eventualmente provocando acción de la policía o una banda enemiga. Los niveles van de buscar “tagging” todo el mapa, a hacer carreras o practicar movimientos diversos.
El punto donde hay que ser honestos es la jugabilidad. Siendo un juego para la Sega Dreamcast en su lanzamiento, es rápido empezar a sentir problemas para controlar nuestros personajes. Incluso tras ajustar y lograr “compensar” este esquema de movimiento en patines, no va a ser una o dos veces que el pobre vándalo se pegue una paliza contra un poste.
Cuando perdés diez segundos de tiempo puede molestar, que fracase la misión es otra cosa. Es posible dominar el juego, pero muy pocos creo pueden llegar a un nivel de confort total. Aparte de eso, pintar grafiti tiene un mini juego el cual también es un poco tosco, pero se aprende a la hora cómo dominarlo.
Sin embargo, hay un argumento donde un título puede ser malo al jugar, pero se compensa por otras partes. Jet Set Radio es la evidencia perfecta de ese concepto.
Notablemente histórico por ser uno de los pioneros del cell-shading, el estilo visual es inmediatamente disfrutable y carismático. Con la actual alta definición luce impecable, incluso casi veinte años de su lanzamiento es un juego que da placer a la vista.
Pero nunca jamás nadie puede hablar de este juego sin que uno salte a decir cual es su canción favorita. Para ser simple, la banda sonora es legendaria.
Compuesta principalmente por Hideki Naganuma, con algunas canciones de B.B Rights, Toronto, Richard Jacques, Deavid Soul, es todo un absoluto diez. Esta mezcla de Hip-Hop, Punk, Electrónica, Jazz Ácido y muchísimo Funk es tan buena que todos los que les gusta buena música variada deben hacerse un favor y escucharla.
En 2012, SEGA publicó el juego a diversas plataformas, PC incluido, asegurando que se mantenga por mucho tiempo. Menos suerte tuvo su aclamada secuela, Jet Set Radio Future, que fuera de emulación está estancada en Xbox.
A pesar del estatus elevado y años de fans en rodillas, lamentablemente SEGA parece desinteresada o incierta sobre hacer más con este título de nicho. No es la única cosa la cual han sido malos manejando, aun hay gente resentida por la Dreamcast o no localizar juegos como Yakuza Ishin! fuera de Japón.
Es posible que Jet Set Radio siempre sea un gran juego de otra época. Triste, pero como casi una ventana a otra era , es un título sumamente disfrutable, y completamente recomendable para casi cualquiera.
