El remake del gran clásico gangster, con cambios bienvenidos y manteniendo el espíritu de lo mundano.
MAFIA es una extraña anomalía en lo que refiere a los juegos de mundo abierto. Extremadamente lineal, enfatizando el realismo y autenticidad, y extremadamente lento. Una fórmula que contrasta con la competencia, desde la mítica GTA a Saints Row, ya que nunca buscó empoderar al protagonista, sino hacerle partícipe de un universo histórico.
MAFIA es un merecido favorito, y su secuela, pese a perder el nivel de detalle, aún logró ser fiel a su misión de recrear el espíritu del cine gángster en un videojuego. MAFIA III fue la oveja negra, abandonando casi todo lo que alguna vez le dio identidad a la franquicia. A tal punto llegó el rechazo que en el proyecto para su aniversario, el desarrollador volvió a las bases, recreando MAFIA en el nuevo motor, bautizado como Definitive Edition.
La trama se centra en Thomas Angelo, taxista convertido mafioso, y su camino a la gloria y perdición. Narrado en retrospectiva, Tommy repasa su vida en la familia Salieri, desde los trabajos menores como robar mercadería, a asesinatos públicos y la destrucción de sus rivales.
La historia define a la jugabilidad, siendo un juego muy lineal, con el hermoso entorno de Lost Heaven sirviendo como puro escenario. Hay poquisima exploración y libertad, y a pesar de ser temáticamente adecuado, puede terminar sintiéndose que no hay mucho para hacer en la ciudad.
En lo jugable no pasa de un típico híbrido de manejar y disparar tercera persona, contrastando con el más arcaico diseño del original. En cierta parte es más fácil en teoría, pero mantiene el espíritu original con autos pesados y tiroteos con poco margen de error.
Notablemente está la opción de una dificultad “clásica” que retiene elementos como usar cargadores en vez de munición y obliga a usar la caja de cambios en los autos. Por encima de todo, hace increiblemente vulnerable a Tommy, forzandole a tener el triple de cuidado en un tiroteo.
Definitive Edition cambia de forma menor pero fundamental varios aspectos del guión y la presentación, siempre en servicio de la historia. Muchos aspectos son bienvenidos, pero algunos pueden chocar contra las intenciones del título original.
Notablemente el diálogo es mucho más “Hollywood” y las voces apuntan a emular el cine, algo que contrasta con los tonos naturales del original. Nuevas escenas son añadidas o modificadas, especialmente en torno a Sarah, la mujer de Thomas, o alteraciones que aceleran el ritmo.
Muchos de estos cambios son naturalmente para un público mayor, así que son subjetivos en cuanto ayudan o dañan la experiencia, pero varias sirven a su trama, como cambiando algunos momentos clave para dar hincapié a las emociones o el drama.
Tristemente carece de muchos detalles pequeños que realmente daban peso a su original, como el transporte público o elementos dinámicos en el manejo de los autos. Otra carencia es el extravagante Modo Libre Extremo, que ofrecía una distracción extra, y las misiones opcionales de Lucas. No es sorpresa que estos elementos en ausencia, y cambios al guión, hayan creado críticas desde la perspectiva de los veteranos. Y si, son una cosa de la cual no hay justificación.
Para lo que cuenta, MAFIA Definitive Edition es una nueva ventana a una de las mejores historias jamás escritas para un videojuego, más accesible que nunca a todos. Sufrirá defectos propios y otros que hereda con honor, pero ninguno se interpone en una experiencia inolvidable.
