Precuela al inicio de la saga, con sus propias ideas originales, algunas buenas y otras no tanto.
La eternamente amada y odiada Capcom tiene una extraña política secreta con su reconocida Resident Evil. Una vez que agotó su forma actual de diseño, decide cambiarla de forma radical pero elegante. Todos hablan de cómo su cuarta entrega abandonó los rompecabezas y supervivencia para enfocarse en acción, o como la séptima en torno a primera persona.
Lo que muchos hacen, por elección o ignorancia, es olvidar a Resident Evil 0, una precuela al primer juego protagonizado por Rebecca Chambers y Billy, un ex-militar convicto. Ya sea por legítimas frustraciones, o la honesta arbitrariedad de su trama, pocos parecen darle un mínimo reconocimiento.
La historia arranca con el equipo STARS por un tren abandonado en busca de un convicto, Billy, el cual se alía con la conocida Rebecca para sobrevivir una extraña plaga de sanguijuelas y zombies. Su desarrollo incluye nuevos detalles al canon de la saga, con más información de la fundación de Umbrella y varios de sus miembros. Para el que le interesa esta discusión de la trama, hay mucho contenido narrativo para digerir e integrar.
Pero 0 tiene más que solo papeleo para los dedicados al “lore“, es un digno final al clasico survival horror, desde cámaras fijas a controles de tanques. Sigue de forma fiel la formula establecida y es uno mas de su larga y genial linea.
Explora habitaciones, sobrevive con limitados suplementos, resuelve rompecabezas para avanzar. Los que ya saben a que va rápidamente van a reconocer los tropos. Capcom aprovecha su talento y experiencia, visualmente es espectacular para 2002, y hay ligeros cambios a los sistemas, como una guia ayuda para encontrar objetos vistos antes en el mapa.
La gran novedad es controlar a Billy y Rebecca por separado, con sus propios inventarios, algunas capacidades individuales y habilidad de combate. Naturalmente Billy resiste más daño y puede empujar cosas pesadas, pero solo Rebecca puede combinar plantas y realizar algunos rompecabezas del escenario.
No hace falta que estén juntos, ya que se pueden separar en su camino, cada uno explorando el mapa solos. Cuando están en equipo, se puede establecer que ayuden o se mantengan alejados, dando un poco de estrategia posible. Sin embargo, se habría apreciado opción de inteligencia adaptativa, ya que si uno de los dos muere, la partida termina.
Esto conlleva lo mejor y peor del juego, tener dos personajes da lugar a encuentros más interesantes y más opciones para avanzar. Pero al mismo tiempo cuidarlos es tedioso, molesto en espacios pequeños, y hace tosco el inventario. Ya no hay cajas de objetos, si querés dejar algo para después se deja en el piso, y intercambiar objetos requiere que haya un espacio libre o que uno se lleve un objeto del compañero.
Lo que es una interesante idea que aporta un grado extra de planificación y consideración puede rápidamente hacer de la experiencia mucho más negativa de lo usual. Realmente se nota por que su recepción fue tan tibia cuando ya empieza a irritar ir y volver por el mapa.
A un fan de la serie, echarle una mirada no es mala idea, y es al final un juego mas que decente. Pero si la parte del tren ya dio regaños, considera dejarlo ahí.