El fallecido ídolo del fútbol, estuvo en suelo comodorense en dos ocasiones distintas, en las que pudo deleitar a los fanáticos con la oportunidad de verlo jugar en vivo.
Era un 12 de diciembre de 1980, y en un partido muy especial, la Selección Argentina campeona del Mundial 78, se enfrentaba a un equipo local en el Estadio Municipal de Comodoro Rivadavia. Por ese entonces, Maradona apenas tenía 19 años, y daba sus primeros pasos en el seleccionado mayor, años antes del gran título de 1986.
El equipo local, estaba conformado por una selección de jugadores, dirigido por José Félix Lázaro. Sin embargo, poco importaban los resultados del partido. La gente fue a ver un show, como nunca antes se había vivido en la ciudad, y así se vio reflejado en el estadio colmado.
De más está decir que el seleccionado nacional ganó con los ojos cerrados, 5 a 0. En diálogo con El Patagónico, Juan “Gato” Maricoy fue uno de los afortunados jugadores comodorenses que vivió el partido en primera persona, y así lo recordaba:
“Cuando nos dijeron a los jugadores de la selección de Comodoro que íbamos a jugar contra la selección argentina campeona del 78, muchos mentían en sus clubes alguna molestia para no lesionarse y estar en ese partido. Nos queríamos morir. Era algo único para la ciudad”.
“Antes de comenzar el partido miré a las tribunas, estaba repleto. Diego (Maradona) estaba recién incorporado porque Menotti no lo había convocado para el Mundial porque era muy chico. Estaba con todas las luces, la llevaba atada al pie, era una luz. Ni pegarle podías a la velocidad que iba. Perdimos 5-0 pero podríamos haber perdido por más. Ellos jugaron a media máquina, era un amistoso nada más.”
No conforme con visitarnos una vez, ya en el nuevo milenio (más específicamente, en el 2007) y ya retirado del fútbol profesional, Maradona pisó una vez más suelo comodorense. Esa vez fue en el Estadio Socio Fundadores, el 7 de diciembre, en el marco de la gira “Showbol”. En ese entonces, para las nuevas generaciones, Maradona ya no era el héroe mundial que todos recordaban y más se lo conocía por sus dramas familiares y sus adicciones.
Sin embargo, a un día de su fallecimiento, es inevitable para los comodorenses no sentir algo de nostalgia al recordar la vez que con muchísima humildad, Maradona demostró, aunque sea una vez más, la razón por la cual se transformó en leyenda.